Cuento en construcción
Te invitamos a continuar esta narración que apenas comienza. Cualquier cosa puede suceder todavía. Este ejercicio está abierto de forma indefinida y una vez sepamos el final de la historia le inventaremos títulos. ¡Participa e invita a tus amigos también!
El cielo estaba despejado en su mayoría, al igual que la carretera. Eran sólo él, su motocicleta, el viento y el desierto: ¡Libertad total! Después de pasar una curva, una recta de por lo menos cinco kilómetros se vislumbra, con un espejismo al final. Presiona el acelerador hasta el fondo, el motor se escucha rugir…